jueves, 16 de julio de 2009

Sobre Alicia




-¿Te parece? Me da un poco de miedo.
-Bueno, acá estoy pasando por una farmacia, lo compro y a la noche me lo hago.
-¿Vas a venir temprano?
-Bueno, otro para vos.
Entra en la farmacia, espera unos segundos y nadie viene a atenderla. Hay una balanza en un costado y piensa en pesarse pero tendría que apoyar el paragüas y la cartera que lleva. Decide no hacerlo. Carraspea y escucha una voz que le dice, Ya va. Alicia mira hacia el techo y ve pequeñas rajaduras que confluyen en una mancha de humedad. Piensa en que se parece a una araña.
-Sí-la voz sale de un hombre.
-Ah-dice Alicia.
-Perdoname, pero estaba en el fondo, recién me llegó el pedido del laboratorio.
El hombre tiene la piel blanca, recortada por la sombra de la barba. Sus ojos son grises del color del acero. Alicia nunca había visto ese color en unos ojos. Es un hombre hermoso.
-¿En qué te puedo ayudar?-le dice el farmacéutico mientras le sonríe, y Alicia recuerda para qué había entrado y se incomoda. Piensa si necesita algo más pero no. Deja entrar un poco de aire en su pecho y le pide lo que había venido a buscar. El hombre guarda su sonrisa y le ofrece cuatro marcas de test de embarazo. Alicia elige el más caro.
Sale de la farmacia con una cajita envuelta en papel rojo.